Diferencias entre vallas metálicas y mallas metálicas

Tanto si tienes una casa tradicional, como si es rústica o moderna y buscas una valla asequible o algo más lujoso, las vallas metálicas son una excelente opción, adecuada para todos los estilos arquitectónicos y presupuestos.

¿Por qué elegir una valla metálica?

Las vallas de jardín suelen estar fabricadas de varios materiales: madera, hormigón, plástico, etc. Pero, ¿por qué el metal es una buena opción? Algunas ventajas importantes de las vallas metálicas son las siguientes:

• Muchas posibilidades: Vallas elegantes con decoraciones o vallas sencillas y sobrias… Las vallas metálicas ofrecen muchas posibilidades, cada una de ellas con diferentes opciones en cuanto a colores, acabados, etc.
• Resistente y duradera: No es de extrañar, las vallas metálicas son muy resistentes y pueden durar muchos años. Esto es tan cierto para las vallas más asequibles como para las más caras.
• Bajo mantenimiento: Una valla metálica requiere poco o ningún mantenimiento. A continuación, encontrarás más información sobre el mantenimiento.

Malla metálica rígida

Las mallas rígidas son mallas de alambre soldado. Son paneles resistentes con los que se puede crear una valla fiable y duradera.

Una malla rígida es más cara que una valla de alambre, pero también ofrece más protección y, en términos de acabado, ofrece mucha más variedad.

Aplicaciones

El vallado rígido es muy adecuado para cercar jardines, parques, aparcamientos, prados, campos deportivos y fábricas. La valla está disponible en varias alturas y acabados, por lo que también puede utilizarse en jardines frontales y laterales.

Los paneles se pueden combinar perfectamente con una puerta de acceso y se pueden utilizar como una valla sólida que ofrece una buena protección contra los visitantes no deseados.

La ventaja sobre una malla de alambre es la resistencia y la estabilidad de la construcción. Por ello, las mallas rígidas se utilizan a menudo como mallas para zonas públicas.

Los paneles ligeramente más ligeros son especialmente adecuados para el uso doméstico. La elección del tipo de panel depende de la función que vaya a cumplir la malla. Para un jardín delantero, en el que se quiere instalar una malla baja, los paneles pesados no suelen ser tan necesarios. En el caso de un local comercial, donde el riesgo de robos es mayor, es importante que las mallas sean resistentes al vandalismo.

Calidad de las mallas metálicas

La resistencia de una malla rígida depende del grosor del alambre, el tamaño de la malla y el tipo de fijación. Cuanto más grueso, menos probable será que se corte.

Sus soldadas no se doblan, ni siquiera cuando se aplica mucha presión. También influye la forma de fijar los paneles a los postes. Hay varios sistemas de fijación y no todos los clips son igual de resistentes. Si eliges una marca conocida, puedes estar seguro de la calidad y de que estarás seguro durante años.

Otras ventajas de las mallas rígidas

– Una vida útil muy larga

– Buena relación calidad-precio

– Sin mantenimiento

– Posibilidad de cultivar plantas trepadoras

– Puede combinarse con una puerta de acceso.

Instalación de las mallas rígidas

La malla rígida puede fijarse con clips especiales a los postes de soporte. Para garantizar la resistencia, suele ser necesario fijar los postes en el suelo con hormigón.

En la instalación, los paneles se fijan primero al poste y luego se colocan. También es posible colocar la malla rígida sobre una base de piedra, por ejemplo, si se utiliza en un balcón. Para ello, existen bases y abrazaderas especiales que se fijan con tornillos al suelo y a la pared.